"Hay una pacífica revolución en marcha, un movimiento espiritual de la mujer que es difícil de percibir a simple vista. A través de los círculos de mujeres con capacidad sanadora, ¿podría la cultura dar un vuelco? Lo que el mundo actualmente necesita es una inyección de la clase de sabiduría que las mujeres tienen, y la forma del círculo es la encarnación de esa sabiduría".

                                                                Jean Shinoda Bolen

¿Qué es un círculo de mujeres?

Los círculos de mujeres son unos espacios de reunión que han resurgido en las últimas décadas y que en el presente se están extendiendo, y cada vez más, a lo largo y ancho del planeta.

Este movimiento imparable ha regresado como respuesta a un anhelo y a un llamado profundos: reconectar con el lado femenino de la divinidad (la fuente, el universo, la conciencia primera, la supraconciencia o como te guste llamarle) y devolverle su lugar en nuestro interior, en nuestras vidas y en nuestras sociedades.

Inspirados en las reuniones de las mujeres sabias, las ancianas y las magas de tiempos antiguos, estos encuentros hoy toman múltiples formas, adaptándose a las necesidades de nuestra época, pero sin perder su esencia sagrada.

Círculos de mujeres cocreadoras

El propósito de Círculos de Mujeres Cocreadoras es ofrecer un espacio para que, juntas, nos apoyemos e inspiremos mutuamente a recuperar nuestra voz, reconectar con nuestra esencia instintiva, alinearnos con nuestros ciclos naturales como mujeres cíclicas en sintonía con los ritmos de la tierra, equilibrar los principios femenino y masculino que habitan en nosotras al igual que en los hombres y en el mundo y reconstruir el arquetipo de hermandad, basado en la cooperación y el apoyo mutuo.

Cuando nos reconectamos con nuestra propia naturaleza, recuperamos también la conexión con la tierra, nuestra fuente de vida.

Estos círculos son una pausa sagrada, un espacio para detenerte, respirar y recordar que no hay ningún lugar al que llegar, que lo importante es el camino y que solo tienes el aquí y el ahora para conectar con la vida, honrar tu camino hasta este momento y ayudarte a sintonizar con tu guía interna y los ritmos de la naturaleza para iluminar tus próximos pasos.

Algunas de las herramientas que nos acompañarán:

• Journaling y coaching grupal: dinámicas poderosas para explorar tu interior.

• Meditación y respiración consciente: momentos para volver al presente y equilibrar mente y cuerpo.

• Danzaterapia chakra healing: movimientos que liberan, armonizan y despiertan tu energía vital. Utilizamos la danza y la música como herramientas de sanación y transformación.

• Trabajo con símbolos, arquetipos y oráculos: herramientas para acceder a nuestra sabiduría intuitiva.

¿Qué encontrarás en los círculos?

Cada encuentro es único, inspirado por el momento cósmico presente, integrando astrología y ciclos naturales como los de la luna.

Las temáticas propuestas están también asociadas a las energías cósmicas del momento y a las necesidades del grupo, para reflexionar y trabajar de forma integral: cuerpo, mente, emociones y espíritu.

Las dinámicas son variadas y profundamente transformadoras.

En los círculos no hay jerarquías. Yo estoy aquí para facilitar, sostener y guiar, pero somos iguales en este viaje. Desde la ausencia de juicios, el propósito es crear un lugar seguro para que cada mujer se conecte consigo misma, su naturaleza más auténtica y con los ritmos naturales que todas compartimos.

Aclaro que estos círculos no buscan promover una lucha entre géneros. El trabajo es de todos. También existen círculos de hombres y espacios mixtos, y cada uno tiene su propósito único en este proceso de transformación colectiva que estamos viviendo.

Durante siglos, en muchas culturas, el polo femenino de la divinidad y de la existencia fue relegado a un segundo plano o incluso borrado de las tradiciones espirituales y religiosas predominantes. La imagen de lo divino se centró casi exclusivamente en arquetipos masculinos: dioses, profetas, líderes y salvadores. Esto no solo marginó la representación de lo femenino en la espiritualidad, sino que también debilitó su presencia en la vida cotidiana, la cultura y las estructuras sociales.

El principio femenino junto con el masculino forman parte de una dualidad natural. Si lo prefieres puedes denominarlos principio receptivo y principio proyectivo. El principio femenino, asociado con cualidades como la intuición, la receptividad, la empatía, la conexión con la naturaleza y los ciclos de la vida, fue considerado menos valioso, eclipsado por una visión que exaltaba lo racional, la dominación, el control, la productividad sin límites... En este proceso, se olvidó que la armonía solo puede alcanzarse cuando integramos ambas polaridades en equilibrio y armonía.

Recuperar el polo femenino para reinstaurar el equilibrio

Recuperar el polo femenino para la vida no significa desplazar lo masculino, sino recordar y honrar la totalidad que reside en ambos principios que no dejan der ser las dos caras de una misma moneda.

Es un acto de sanación colectiva y personal, un regreso a la esencia y al equilibrio que nos conecta con nosotras mismas, con la tierra y con el universo.

Si estás buscando reconectar contigo y con la vida de una manera más auténtica, será un honor acompañarte en esta práctica mágica, sagrada y transformadora.

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